LENGUAJE CORPORAL EN PERROS

Conocer estas señales es lo básico que debe saber la persona que convive con un perro, sin embargo la realidad es otra. Muy pocas personas que nos llaman para solucionar un comportamiento conocen alguna de estas señales, pero voy un paso más allá, prácticamente nadie de las personas que nos contactan, y anteriormente habían contratado a un profesional de educación canina, tampoco conocen estas señales. Lo que os voy a mostrar es real, y pertenecen a nuestra base de datos interna, el 98,8% de las personas con las que hemos trabajado, no conocían ningúna señal ni de estrés ni de apaciguamiento, y eso que muchas de ellas ya habían trabajado con algún profesional, con anterioridad. 

Entonces quiero hacerte saber que lo mínimo que tienes que conocer para poder convivir con un perro son estás señales. Si no, ¿cómo vas a dar apoyo a tu perro en las situaciones donde no se encuentra cómodo?, no realizar una intervención en un situación donde el perro lo está pasando mal, significa que el perro tendrá que dar solución de la mejor forma posible a esa situación, esto es una moneda al aire, porque en muchos casos los perros se ven forzados en muchas situaciones a tomar medidas drásticas, y luego nos arrepentimos y nos sorprendemos de porque ahora mi perro se comporta así con el cartero, con mi hijo, con las visitas, con otros perros, en el veterinario, y una lista larga que no terminaria hoy, aunque quisiera.

Quiero haceros saber que en Jescan tenemos un curso mucho más completo que este vídeo y con una calidad visual mucho más elevada sobre las señales de estrés y apaciguamiento, está grabado por nosotros y con todo lujo de detalles para que no se os escape nada.

DESCODIFICANDO EL LENGUAJE CANINO

Si te estás preguntado si con este vídeo vas a poder solucionar los problemas con tu perro (vídeo con el que comienza este artículo), ¡no!, este video no es para eso. Fijaros en esto, a muchas personas les ofrecemos el curso de señales, y nos encontramos con que la gran mayoría las rechaza, meses después parte de las personas que rechazaron el curso nos vuelve a llamar y nos explican sus problemas, problemas que con solo haber comprendido a su perro se podrían haber evitado.

• Pero claro nos centramos tanto en querer una solución mágica y que no represente ningún esfuerzo, que luego pasa lo que pasa. Por ejemplo, cosas cotidianas como esta pasan un montón: Le dices a tu perro que baje del sofá, él muestra señales de apaciguamiento y de estrés, pero como no lo entiendes, sigues insistiendo, aunque no lo hagas con mala intención, él te está diciendo, papá, mamá, por favor para ya, me estoy estresando, cuando esto lo repites un día y otro y otro y otro más, llega el momento que el bicho desecha el plan diplomático y pasa a la acción, y entonces te enseña los dientes o te muerde, y está señal si que la conoces, así que el bicho decide que este va a ser su plan, a partir de ahora. 

• Otro más: vamos paseando por la calle con nuestro perro, y de repente vemos a otro perro, nos acercamos para que se relacionen, resulta que el otro perro es muy bruto relacionándose, nuestro perro no sale huyendo, no gime, ni hace nada que nos pueda hacer sospechar que no se está experimentando bien, pero sí que muestra señales de estrés y apaciguamiento, pero como no sabemos interpretarlas, experiencia negativa para nuestro perro. Cuando esto se repita no sé cuántas veces, quizás nuestro perro cuando vea a algunos perros empiece a ladrar, a morder, a tirar de la correa.

• El último ejemplo: Vamos al veterinario con nuestro perro, pero no muestra señales que nos puedan poner en alerta de que al bichejo no le está gustando la experiencia, yo ya sé que si el perro tiembla, llora cuando lo tocan, se hace pis, o se caga encima sabes reconocer estás señales, pero estás señales no se tienen que llegar a mostrar, y como norma general las señales de estrés y apaciguamiento más comunes suelen ser más “sutiles”. Así que imagina que vas al veterinario y muestra señales de estrés y apaciguamiento durante la estancia y la exploración o atención, pero como las sabes identificar no puedes intervenir, no vayas a pensar que el veterinario las sabe y que sabe cómo intervenir para que tu perro no lo pase mal, por que lo más fácil es que no sea así. Entonces el primer día aparentemente no pasa nada, a la segunda visita el veterinario se observa como el perro está incómodo, pero no se le da importancia, en la tercera resulta que el perro no quiere entrar ni por la puerta, y la atención del veterinario es una odisea porque no se deja manipular, en las siguientes intervenciones tiene que ser con bozal, y la siguientes ni siquiera se le puede poner el bozal. 

Cuando los tutores nos contactan para algún problema, si lo veo necesario les ofrezco les ofrezco nuestro curso de Señales, en la mayoría de los casos es rechazado por que lo que importa es el problema, y no se dan cuenta, aunque se lo explico, que para solucionar el problema, a parte de la técnica es necesario conocer la comunicación canina básica, porque sino pasa lo que pasa.

Los problemas que hemos visto anteriormente son básicos, pero si nos ponemos a analizar el comportamiento que tienen los perros en esos ejemplos simulados, tenéis que saber que hay que valorar un montonazo de cosas para cada situación, yo lo he abreviado porque solo quiero que se entienda sin que sea demasiado largo, pero el proceso por el cual se llega a esas situaciones es sencillo pero más largo de explicar. Ahora si vamos a ver algunas señales de apaciguamiento

EL LENGUAJE CANINO SEÑALES DE ESTRÉS

Te vamos a mostrar las señales de estrés en vídeo, pero antes esto.. Las señales de estrés de los perros son desconocidas por la gran mayoría de tutores, estas son básicas para poder construir una buena convivencia con tu perro. Los perros emiten señales de estrés a puñados en su día a día, y como norma general pasan desapercibidas pese a lo importantes que son.

¿Por qué las señales de estrés son importantes? Es bastante sencillo, si tu perro lo está pasando mal y no sabes identificarlo, ¿cómo vas a poder ayudarlo?, no vas a poder realizar ningúna intervención, o modificación de futuras experiencias, dado que para tí no está ocurriendo nada, y claro esto da paso a las malas experiencias, que a su vez dan paso a comportamientos que no están muy bien vistos en la sociedad humana, o por lo menos en la “civilizada”.

No solo es importante conocer las señales de estrés, sino también conocer las señales de apaciguamiento, tenéis un vídeo sobre las señales de calma y otro sobre las señales de apaciguamiento que os dejamos en el enlace fijado, ambas son vitales para poder convivir con estos seres a los que tanto amamos. En Jescan.es tenéis un curso mucho más completo y especializado tanto en señales de apaciguamiento como en señales de estrés, donde veréis en vídeo cómo y porque suelen los perros mostrar estas señales, además está grabado por nosotros.

Mucha gente parece saber conocer cuando su perro está estresado, cuando un perro tiembla en exceso, tiene babeo excesivo, cuando quiere huir, o incluso cuando el corazón le va a mil por hora. Sin embargo estas señales son las más extremas y evidentes. De hecho cuando le preguntamos a un cliente si sabe reconocer las señales de estrés y este nos dice que sí, nos suele mencionar estas. Las señales de estrés más frecuentes son las que pasan desapercibidas, estas hacen mella en las experiencias que tienen lugar en el día a día del bicho. 

Cuando un perro está mostrando señales de estrés es más probable que termine reaccionando mal, y por reaccionar mal no solo me refiero a agresividad. Además pensar que el estrés es acumulativo, y esto quiere decir que si tenemos un perro que vive experiencias de estrés en su día a día, cada día que pasa es más probable que termine con un comportamiento que no os guste. Ahora bien, esto es pensando en nosotros, pero la peor parte se la llevan ellos, que son los que terminan experimentando es su cuerpecillo todo ese chute químico día a día.

Os voy a poner un ejemplo de un comportamiento muy típico, imaginad que una persona viene a saludar a nuestro perro, y lo hace como normalmente lo suele hacer todo el mundo, con buena intención pero realizando un saludo que para los perros es molesto, o sea, se dirige directamente hacia el perro, se abalanza sobre él, le pone las manos en la cabeza y estas cosas, aprovecho para deciros que tenéis un vídeo sobre cómo saludar a un perro desconocido en el canal. Seguimos, entonces mientras la persona se dispone a acariciarlo aparte de las señales de apaciguamiento, emite señales de estrés, o sea, lo está pasando mal, ¿qué creéis que puede pasar cuando esto se repita 20 veces? Persona que viene a saludar, lo paso mal, esto va a predisponer al perro muy negativamente para estas futuras situaciones y por lo tanto es probable que reaccione como no queremos, pero evidentemente como no conocemos las señales, no sabremos si lo pasa bien o lo pasa mal.

Ahora fijaros en este escenario, un perro que experimenta estrés, cuando lo saludan, cuando ve a otros perros, cuando hay ciertos ruidos, cuando interaccionamos con él, termina acumulando tal cantidad de estrés, que como hemos dicho condiciona su comportamiento. O sea, un perro que está estresado es más fácil que rompa cosas, que muerda a las personas, que se pelee con otros perros y este tipo de cosas que no nos gustan.

La mayor parte de nuestros clientes suelen entender mucho mejor lo que le ocurre a sus perros cuando les ponemos un ejemplo de la especie humana, así que mirar este ejemplo: Imagina que hoy te levantas tarde para ir al trabajo, no has oído el despertador y vas a llegar tarde, te estás imaginando la bronca que te va a echar tu jefe y tu organismo reacciona con estrés, cuando bajas a coger el coche te das cuenta que te han pinchado la rueda del coche, así que más estrés, una parte por la rueda y otra por que vas a llegar aún más tarde. Una vez solventado el incidente aceleras para recuperar algo de tiempo en el trayecto al trabajo, con tal mala suerte que te pilla tráfico y multa, más estrés, pero no solo eso, aún llegas más tarde. Una vez llegas al trabajo te cae la bronca que te estabas imaginando, así que mientras te están echando la bronca tu organismo sigue reaccionando con estrés, y recuerda que es acumulativo. Te pegas un día tremendo con todo el retraso de trabajo y cuando consigues terminar para irte a casa, te das cuenta que con las prisas has dejado el coche mal aparcado y te han denunciado. Cuando llegas a casa te bajas del coche y hace mucho viento, así que tu pelo está hiperdespeinado, subes a casa y tu pareja te dice: vaya pelos traes, no te gusta el comentario así que montas en cólera y empiezas a discutir.

Ahora imagina un día maravilloso, todo lo contrario, y de camino a casa te das cuenta de que tienes un décimo de lotería, así que paras en un puesto de administración de lotería para comprobar si tu décimo está premiado, con la suerte de que tienes una recompensa de 150€. Cuando llegas a casa hace mucho viento y tu pelo queda hiperdespeinado, subes a casa y tu pareja te dice: vaya pelos traes, le respondes es que hace mucho viento, que cenamos mi amor.

Los perros viven en su día a día muchas situaciones de estrés, más de las que os imagináis, así que por eso es importante detectar dichas situaciones para que el perro no viva una odisea cada día, y que debido al estrés termine respondiendo de forma inadecuada en situaciones donde no debería, pero que debido a que está condicionado químicamente por su organismo, termina ejecutando comportamientos que no nos gustan. Además debes saber que las sustancias del estrés que navegan por nuestro organismo pueden tardar desde días, hasta meses en desaparecer.

Explicamos a nuestros clientes la importancia de conocer todo esto, y en muchos casos incluso con una explicación como la que os hemos dado, siguen sin interesarle la información, principalmente porque están demasiado centrados en el problema y no quieren entender que en muchas ocasiones los problemas son ocasionados por pequeños detalles que ocurren en el día a día, no debemos centrarnos en trabajar los síntomas, hay que tratar la enfermedad, y si es necesario también los síntomas.

En nuestro curso unos 50 vídeos sobre señales de estrés y apaciguamiento, así para que este vídeo no quede demasiado largo solo vamos a mostrar algunas de las más habituales.

• El jadeo: es uno de los signos de estrés más frecuentes, un perro que no tiene calor y que respira de esta forma tan agitada, nos indicará que está experimentando estrés, cuando los perros muestran este jadeo se pronuncian unas arrugas en las comisura de la boca, a esto en Jescan le llamamos la sonrisa del joker, el jadeo nos da mucha información sobre la cantidad de estrés que está experimentando el perro, la lengua , el sonido de la respiración, la frecuencia, nos permite saber cómo se está experimentando, esto lo explicamos en nuestro curso en profundidad, así que recordar que cuando vuestro perro está jadeando, no hace calor y las comisuras de la boca están hacia atrás provocando la sonrisa del joker, hay estrés, con esto es suficiente como para que reconozcas esta señal.

• La piloerección: se muestra cuando un perro experimenta estrés, esto se suele expresar por parte de los tutores como: mi perro está erizado, esto es piloerección. Se puede dar de una forma más leve o más pronunciada, o sea, los pelitos pueden estar más elevados o menos, más elevados significa mayor respuesta de estrés, también se puede producir que haya una mayor zona con piloerección, o sea, se puede dar desde el cuello hasta la cola con una anchura por decir algo de 10 cm, esto corresponde a un perro con una respuesta elevada, lo normal es que se erize la parte de la cruz o el lomo, pero cuando más intensidad hay se suele erizar todo el pelo de la espina dorsal, desde el cuello hasta la grupa, fijaros en la imagen, esta perra experimenta un pico muy agudo de estrés. Desde el cuello hasta la cola, el pelo muy erizado, y fijaros en la anchura del pelo erizado, como lleva un arnés puesto, no se pueden ver los pelos erizados que corresponden a la cruz, pero estaría totalmente erizada.

• El babeo excesivo: es producido por fuertes niveles de estrés, a medida que el babeo es más intenso, significa que existe mayor nivel estrés. En esta imágen podéis apreciar a parte del babeo muchas más señales, como por ejemplo, una que ya hemos visto, que es, la sonrisa del joker, veis la comisuras de la boca hacia atrás y esas arruguitas producidas por la hiperventilación.

• La dilatación pupilar: también es una respuesta fuerte de estrés, está muy relacionada con la excitación, os he puesto está imagen para que podáis identificar bien la parte de la pupila porque en estos momentos no tenía ningún vídeo preparado fuera de nuestro curso para mostraros, pero ya sabéis que si vuestro perro presenta una pupila dilatada junto con otras señales de estrés, seguramente estará experimentando un nivel de estrés bastante elevado, aunque ya sabéis que un alto estado de excitación también podría provocar la dilatación.

Existen señales de estrés muy especiales a la par que habituales, me estoy refiriendo a las señales de desplazamiento. Estas señales son producidas por el estrés, los perros las suelen mostrar para autorregularse o si lo entendéis mejor para eliminar el estrés. Os vamos a mostrar las más habituales y que seguro que vuestros perros emiten y que hasta ahora no sabíais que significaba. Bostezar, sacudirse, lamerse los belfos o la nariz, estirarse. De cada una de ellas podríamos hablar largo y tendido, pero con que las conozcáis nos sirve.

Seguro que esto os interesa a los que sois profesionales, yo mismo he visto a personas muy experimentadas en la educación canina que les cuesta diferenciar estas conductas: ¿por qué se llaman conductas de desplazamiento? Fijaros, si un perro emite una señal como bostezar y no se está despertando, se dice que es una señal desplazada, o sea se produce fuera de contexto, y además le sirve para autorregularse, si un perro se sacude pero en realidad no está mojado, está acción se produce fuera de contexto puesto que no está mojado. Si un perro se lame los belfos sin que haya presencia de comida, intenta autorregularse o “tranquilizarse” si lo entendéis mejor. Si un perro se estira pero no se acaba de despertar, está fuera de contexto y por lo tanto se considera una conducta desplazada, o sea, son conductas de desplazamiento.

Estas conductas son producidas por situaciones donde el perro experimenta estrés, algunas de estas señales el perro las muestra después del pico o episodio de estrés, mientras que la mayoría de las señales de estrés se muestran en el instante que el perro tiene el estrés. De esta forma consigue “quitarse” vamos a decir el estrés, yo prefiero decir autorregulación, pero si lo entendéis mejor, así también nos sirve.

Para que lo entendáis mejor, vais paseando por la calle y de repente alguien cierra la puerta de una casa con mucha fuerza generando un gran sonido, vuestro perro se asusta, sigue caminando y aparentemente no ha pasado nada, pero pasados digamos 15 segundos se sacude, este es un ejemplo claro de cómo algunas señales de desplazamiento se producen después del evento estresante.

El bostezo es una señal muy común de desplazamiento, en estás imágenes podéis ver a un perro bostezando debido a la gran cantidad de estrés que padece, intenta autorregularse.

Estirarse es otra señal que indica estrés, recordar tener en cuenta el contexto de la situación, si se acaba de despertar solo se está estirando.

Sacudirse es una de las señales más frecuentes. En la sacudida podemos valorar varias cosas, la frecuencia de la sacudida, la intensidad y sobre todo muy importante, el tiempo que tarda en realizarla desde el evento estresante, todo ello nos aporta información acerca de cómo está viviendo la situación el bichejo.

El relamido de los belfos y nariz, es una señal bastante típica de estrés, aquí la frecuencia del lamido, como lo pronunciado que sea el lamido nos dará información acerca de la cantidad de estrés que está viviendo ante dicha situación.