La mayoría de los problemas de convivencia que surgen con nuestros perros se deben a una mala comunicación. Poder entender a nuestro perro además de una necesidad es una obligación, dado que hemos elegido pasar la vida junto a ellos. No es lo mismo tener un perro con el que puedas disfrutar en cualquier lugar y en cualquier momento que tener un problema, que es lo que termina ocurriendo cuando no se hacen las cosas bien.

Que tu perro pueda ser feliz a tu lado depende en gran medida de los conocimientos que vayas a adquirir para poder entenderlo y relacionarte con él.